Después del artículo dedicado
exclusivamente a uno de los sistemas de videojuegos más míticos y exuberantes y
sin el cual el mundo de los videojuegos no sería lo que es hoy en día, MVS-Neo
Geo, en Arcade Vintage volvemos a la carga con otra entrada dedicada en
exclusiva a la grandiosa SNK. Pero en esta ocasión, vamos a sumergimos en las aguas
turbias y revueltas que agitaron a la compañía durante los últimos coletazos del pasado siglo XX, mirando directamente la triste decadencia que sufrió SNK y que lamentablemente se desencadenó tras los bien merecidos laureles
cosechados a principio y mediados de los noventa: su dolorosa (y en parte
inexplicable) caída libre a los infiernos. Una triste pero apasionante historia
donde veremos cómo las erróneas decisiones, los fracasos comerciales, la
traición y la bancarrota acabaron convergiendo en un trágico y prácticamente
decisivo punto final sin retorno, pero que, para regocijo del personal, acabó sorprendiendo
a propios y extraños con una furiosa y bien merecida venganza que propició la
inesperada y no menos deseada resurrección de la propia SNK, que resurgió de
sus propias cenizas cual Ave Fénix para convertirse en lo que posteriormente conocimos
como SNK Playmore (actualmente ya vuelve a ser únicamente SNK).
¡Esperad! ¡Quieto todo el mundo!
Podéis estar tranquilos, que no estamos hablando de ninguna de las inmortales
novelas del atormentado Shakespeare o, y de ello sí que podéis dar las gracias,
bribones, de ninguno de los soporíferos dramas telenovelescos que abducían a nuestras madres, tías o abuelas, que
incluso llegaban al extremo de desconectar teléfono y timbre con tal de no
perder el interesante hilo de la
pastosa, interminable y repetitiva historia del consiguiente culebrón
venezolano de turno que estuviesen echando por la tele (para que luego nos
increparan por estar enganchados con la maquinita,
ajenos a todo como si no existiera nada más. Irónico, ¿eh?).
Preparaos, porque del imperecedero
The Future is Now que tanto significó
para millones de jugadores, pasamos al The
Pain is Now con el que SNK se despidió no sólo del siglo XX, sino de la
época más gloriosa de toda su historia.
Ready? GO!